Hoy en día podemos encontrar un sin número de diferentes prácticas sexuales que nos permiten a todos ser capaces de experimentar distintas aproximaciones al placer. Aunque dentro de nuestra sociedad muchas de estas prácticas son consideradas tabúes, con el paso del tiempo podemos encontrar diversas alternativas que se van a adaptando a los gustos más exigentes y a los requerimientos de quienes están dispuestos a experimentar liberándose de prejuicios.
El pegging, por ejemplo, es una práctica que en la actualidad, aunque es muy practicada, sigue siendo tabú. Consiste en la penetración anal de un hombre heterosexual, por su pareja mujer, también heterosexual, por medio de un arnés sexual que va sujeto a su pelvis. Debe quedar claro que esta práctica no se limita exclusivamente a algún tipo de orientación sexual. Esta práctica es ejercida por parejas de lesbianas, pero en ellas la penetración no solo es anal, también es vaginal y bajo estas características deja de tomar el nombre de pegging.
El pegging es además una fantasía sexual muy repetida y común. La podemos categorizar dentro de las prácticas sexuales en sumisión y dominación. Se llevada a cabo con el objetivo de saborear alternativas de sensación que sólo se pueden adquirir por medio de la penetración anal. Se debe a que es la única forma de proveer estimulación directa de la próstata masculina.
El placer que pueden obtener los hombres con esta alternativa es múltiple. En principio, el ano aloja una gran cantidad de terminaciones nerviosas que en conjunto con la estimulación prostática, hacen de esta, una práctica sexual apetecida y significativa.
La próstata, recuerden ustedes que es el una glándula de los mamíferos hombres, perteneciente a su aparato reproductivo. Se encuentra unida al cuello de la vejiga de la orina y a la uretra. Segrega un líquido blanquecino y viscoso cuya función es estimular el movimiento de los espermatozoides. Al recibir estimulación directa, proporciona múltiples sensaciones de placer.
Por otra parte, al estimular la próstata no se experimenta únicamente placer físico, también se experimenta placer psicológico. La razón obvia es argumentar que el orgasmo es una experiencia psicológica, y adicional, al ser una práctica sexual sumisa, proporciona mayor placer a hombres que disfrutan del sadismo o la sumisión.
Su desarrollo no sólo está orientado a proporcionar placer a los hombres. Psicológicamente las mujeres también pueden gozar de sus beneficios. Para muchas mujeres asumir el rol dominante puede resultar bastante excitante.
Noten también que la inclusión de arneses sexuales o strapons y la evolución tecnológica de estos mismos, hacen que su uso sea físicamente muy estimulante. Además, proporciona exquisitas vibraciones y diferentes tipos de estimulación en la vagina y el ano.
Elementos que necesitarás para practicar el Pegging
Con la amplia variedad de oferta en el mercado para adultos es imprescindible seleccionar los instrumentos sexuales con mucha prudencia. Teniendo en cuenta siempre los gustos y requerimientos de todos los involucrados en la relación, proponemos: VACULOCK SILICONE PEGGING SET BLACK. Se trata de un arnés de muy buena calidad. Te va a proporcionar seguridad y comodidad a la hora de ser utilizado. Dispone de diferentes alternativas de tamaño que adapta.
Para el desarrollo de una buena práctica de Pegging no es suficiente conocer sobre su ejecución. Los juegos previos aquí, juegan un papel fundamental para que su práctica sea completamente llena de placer y comodidad. Es muy importante la estimulación previa del ano de manera intensa y constante. El objetivo es promover relajación y dilatación que permita penetraciones más cómodas y placenteras. Otro factor de suma importancia, a la hora de realizar cualquier penetración anal, es la lubricación. Debido a que el ano por sus características biológicas no presenta lubricación natural, es fundamental incorporarla por medio de un producto que cuente con los estándares de calidad adecuados. Productos que permitan una penetración más agradable, libre de dolor y llena de placer en su totalidad. El lubricante anal a base de agua PJUR cuenta con una fina elaboración, permite que la penetración anal sean orgánica.
El pegging es sólo otra alternativa de disfrute a nivel sexual. Es muy importe contar con tiempo y un espacio adecuado para su ejecución. Alcanzar los niveles de placer deseados depende mucho de ellos dos.
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